La muerte más trágica es la que uno mismo provoca sin saberlo. Este relato muestra, a través de los ojos de un pez, cómo el mar se ha vuelto un campo en ruinas. Un suicidio colectivo disfrazado de rutina. Una advertencia sobre el daño del consumo irresponsable.
Valeria Yazel Velázquez Santillán
Luna Yowalli González Correa
1° Bachillerato
Colegio Madrid, México